Cada año, desde 1983, la Fundación Venezolana Contra la Parálisis Infantil convocaba al país a participar en el Súper Bingo de la Bondad, el principal programa de recaudación de fondos para el Hospital Ortopédico Infantil.  Desde 2017 no ha vuelto a tener otra edición. Que el bingo regrese es una idea que está vigente.

Por Carmen Victoria Inojosa 

—¿Quiere contribuir con el ortopédico? Compre su cartón—. 

Esta frase se repetía en los bancos, quioscos, centros comerciales y en televisión nacional. Como dijo Amador Bendayan en 1985: “Un bingo lleno de amor porque es para ayudar a los niñitos del Hospital Ortopédico Infantil”. 

Cada año, desde 1983, la Fundación Venezolana Contra la Parálisis Infantil convocaba al país a participar en el Súper Bingo de la Bondad, el principal programa de recaudación de fondos para el Hospital Ortopédico Infantil (HOI). Desde 2017 no se ha vuelto a jugar, la coyuntura política y la pandemia de Covid-19 no lo han permitido. 

Siendo una niña Andreína Vogeler Mendoza, hoy directora ejecutiva de la Fundación Venezolana Contra la Parálisis Infantil, recorría los pasillos de Venevisión, el canal que cada año transmitía en vivo el Súper Bingo de la Bondad a beneficio del HOI. “Venía con un grupo de amigas del colegio a atender los teléfonos cuando la gente llamaba para dar donaciones. Me involucré desde muy pequeña, me encantaba ir al canal y ver a todos los artistas, por supuesto, todas querían ser mis amigas para ir conmigo. Fui creciendo con ese programa”, relata Vogeler. 

Que el bingo regrese es una idea vigente: “No queremos perder el bingo y el ritual que tiene, hay que estudiar bien a fondo cómo se hará, involucrando no solo al sistema financiero, sino a otras empresas que ayuden a vender los cartones y a personas naturales. El bingo lo tenemos latente todo el tiempo. Porque la gente siempre nos pregunta”, dice Maruja Mata, gerente de Comunicaciones y Mercadeo del HOI. 

Desde 2001 la Fundación Venezolana contra la Parálisis Infantil es uno de los Socios Sociales de Banesco. “Banesco era uno de los principales bancos aliados, contábamos ciegamente con la distribución de los cartones en sus agencias, después eso, la alianza se fue consolidando mucho más y  comenzaron a apoyarnos en otros proyectos”, manifestó Vogeler. 

Pensar e imaginar el bingo para el próximo año conmueve a Vogeler. Quiere que no se pierda la tradición ni la esencia del programa. “Nuestro reto es cómo llegarle a esa Venezuela que está ahí, que en algún momento nos apoyó y que quisiéramos volver a retomar. La Venezuela solidaria”, dice. 

En el aniversario de la Fundación Venezolana Contra la Parálisis Infantil uno de los deseos es que el Bingo de la Bondad se vuelva a jugar.  El 19 de junio la fundación cumplió 82 años, a pesar de los años, su razón de ser se mantiene: la atención de niños y jóvenes con problemas osteomusculares con edades comprendidas entre 0 y 16 años de escasos recursos económicos. 

Por iniciativa del empresario Eugenio Mendoza se creó La Fundación Venezolana Contra la Parálisis Infantil, la primera institución legalmente constituida en el país para dar respuesta a un problema nacional: la poliomielitis. La institución recaudó fondos para construir el Hospital Antipoliomielítico de Caracas, que abrió sus puertas en 1945.

“Mi abuelo trabajaba al lado, entonces solía venir muchísimo. Me cuentan que levantaba las ollas y probaba la comida de los pacientes. Lo que más me impresionó fue su capacidad de ver y proyectar hacia el futuro. Cuando leemos las actas de la época, finales de los años 50, él ya se daba cuenta que esta sería una institución muy grande y que no iba a poder mantenerse con las acciones únicamente de sus empresas”, cuenta Vogeler..

Una década después, tras la campaña de vacunación contra la poliomielitis, a través de la cual se erradicó prácticamente la enfermedad, el hospital cambia su nombre por Hospital Ortopédico Infantil. En la actualidad es un centro de referencia nacional en ortopedia, que cuenta con una generación de relevo al frente, un centro de docencia y 29 especialidades médicas.

“Nunca hemos dejado de pensar en nuestra razón de ser, eso es lo que nos hace diferentes. El hospital es un lugar especial para todos, aquí hay algo, una especie de magia. Yo que tengo 35 años aquí todavía se me aprieta el corazón cuando veo un caso de un niño y cuando una mamá nos da las gracias”, expresó Vogeler. 

¿Por qué el HOI es único en el país?

• Laboratorio de la marcha 

Se asemeja a un estudio de televisión donde se hacen diagnósticos más precisos al momento de una intervención quirúrgica. 

• Tratamiento a niños con osteogénesis imperfecta

Se trata de una enfermedad degenerativa llamada huesos de cristal. El HOI es el único que ofrece tratamiento paliativo para mejorar la calidad de vida. 

• Médicos certificados

Dos médicos certificados para aplicar el método Ponseti para el tratamiento del pie equinovaro. 

En datos 

La institución ha atendido a casi 7,5 millones de pacientes desde su fundación.