Siempre hay grupos de personas intentando hackear o acceder a nuestra información más importante y robarla, por lo cual es necesario conocer y tener en cuenta las señales que nos podrían decir que nuestra computadora está siendo víctima de un ataque.
Por Sarai Coscojuela
El uso de las computadoras y el Internet se ha vuelto imprescindible en nuestras vidas. Forma parte de nuestro día a día, por eso es importante mantener los niveles más altos de seguridad, para poder tener nuestra información y equipos a buen resguardo.
Pero sabemos que siempre hay grupos de personas intentando hackear o acceder a nuestra información más importante y robarla, por lo cual es necesario conocer y tener en cuenta las señales que nos podrían decir que nuestra computadora está siendo víctima de un ataque.
Por ejemplo, si la computadora empieza a ralentizarse sin una razón aparente o si siempre está caliente y los ventiladores están funcionando constantemente, podrían ser señales de alerta.
También si la webcam se abre o graba sin previo aviso, ves luces que parpadean cuando la computadora está en modo reposo, los programas van muy lentos o se “crashean”, es decir, dejan de funcionar como deberían y no responden. Muchas veces el programa se queda congelado y no responde.
Otras señales de un posible hackeo son que el navegador tiene extensiones que no has instalado, las páginas web que visitas se llenan de ventanas emergentes, el buscador de inicio se ha cambiado y no puedes acceder a algunas páginas web, a las que las demás personas sí pueden entrar sin problema.
Igualmente, si el antivirus abre ventanas emergentes debes poner atención.
Sin embargo, hay formas de poder prevenir estas situaciones en tus equipos, como por ejemplo, descargar un antivirus de confianza que detecta y neutraliza malware y bloquee las conexiones con webs maliciosas de phishing, que se hacen pasar por otras personas, empresas o servicios de confianza para que compartas tu contraseña, número de tarjeta, entre otros datos.
Debes mantener el antivirus actualizado, así como el sistema operativo.
Otra recomendación es no entrar en páginas que no sean seguras y no descargues nunca archivos adjuntos sin verificar. Tampoco entres en enlaces de correo electrónico de remitentes desconocidos.
También recuerda que ninguna entidad bancaria o sistema de pago online te pedirá un correo electrónico o tu contraseña o número de tarjeta de débito.
Es importante tener contraseñas robustas, por eso elige aquellas que puedan ser largas y complicadas y no la uses en todas tus redes o computadora, porque si te hackean podrán tener acceso a todo.
Para esto puede ser útil un gestor de contraseñas, que te ayuda a elegir una fuerte, te la recuerda y te avisa si la estás usando en demasiados sitios.