Cada día, 1,3 millones de personas mueren y 50 millones resultan heridas en las carreteras del mundo.
Por este motivo, los fabricantes de carros están enfrascados en una carrera para crear un vehículo que nunca se accidente.
¿Pero estarán los conductores dispuestos a que una computadora controle por completo el auto?
Hace menos de 30 años, el cinturón de seguridad era la innovación más revolucionaria para mantenernos a salvo de los accidentes de tráfico.
Desde entonces, hemos visto incorporados en vehículos airbags y sistemas que evitan el bloqueo de los freno.
Ahora lo que se viene es la tecnología para evitar choques; sistemas que pueden alertar a los conductores del peligro y que incluso toman medidas para que los accidentes no ocurran, lo que según los expertos podría disminuir el número de choques en la carretera.
La tecnología anti-choques
Volvo, por ejemplo, confía tanto en el poder de esta tecnología, que aseguró que en el año 2020 nadie morirá o saldrá gravemente herido conduciendo uno de sus nuevos carros.
El fabricante sueco quiere diseñar un vehículo que proteja totalmente a sus ocupantes.
“La mayor causa de accidentes es una falta de atención del conductor o conductores distraídos. Esta tecnología da ojos a los autos y sabe cuándo el conductor falla”, explica Thomas Broberg, técnico consejero de seguridad del centro de investigación de Volvo en Gothenburg.
Otros fabricantes prometen cosas similares. Toyota dice que su fin es lograr “cero muertes y heridos”, aunque todavía no ha dicho cómo lo logrará. Por su parte Ford, ya anuncia que su nuevo Focus, que incorpora un llamado “sistema de protección inteligente”, es uno de los vehículos más seguros del mercado masivo.
¿De qué tecnología estamos hablando? ¿Es realmente efectiva?
Lo último en seguridad en carretera
Sistemas que detectan puntos ciegos y avisan al conductor, sistemas de control de estabilidad que pueden detectar y prevenir un patinazo, son algunos de los nuevos dispositivos incorporados en los vehículos.
Algunos coches ya incluyen unas luces frontales que mejoran la visibilidad nocturna -ya que se mueven en las curvas- o sistemas que avisan al conductor cuando se va a producir una colisión o cuando se desvía de las líneas de la carretera.
Un estudio del instituto de seguros para la seguridad en carretera en los Estados Unidos estima que cuatro de estos dispositivos anti-choque: la alerta de traspaso de margen de la carretera, alerta de colisión frontal, detector de puntos ciegos y las luces adaptadas, pueden prevenir uno de cada tres accidentes fatales y uno de cada cinco choques con heridos graves o moderados.
Sin embargo, aquellos sistemas que intervienen en la conducción causan mucha más controversia.
Lo que se viene
Se está investigando la fabricación de sistemas de frenado autónomo, que pueden detener un carro cuando otros vehículos u obstáculos están cerca, así como otros que no sólo avisan, sino que evitan que el vehículo se salga de la carretera, lo que implica que el dispositivo ejerza una fuerza a través de la dirección asistida si el conductor se desvía.
Los fabricantes de autos también están desarrollando controles de navegación adaptados, que pueden mantener de forma automática una velocidad y distancia segura con otros vehículos, así como una velocidad adaptada inteligente, que puede evitar que el conductor exceda el límite de velocidad.
Pero estas tecnologías todavía están en pañales.
Resultados
En 2008 un estudio de la Unión Europea realizado por el Centro de Investigación Tecnológica finlandés VTT, descubrió que la tecnología más prometedora después del control de estabilidad electrónico (obligatoria en los nuevos carros europeos) es el sistema que evita que el conductor se salga de la carretera. Se estima que puede reducir las muertes en un 15%.
Los mismos investigadores hallaron que las funciones que advierten a conductores que exceden el límite de velocidad y otros posibles peligros reduciría las muertes en un 13% y que el sistema de frenado de emergencia y alerta de somnolencia del conductor, podría reducir las muertes en un 7% y un 5%.
Pero otros estudios son más optimistas. El Instituto de Muertes en la Carretera de los Estados Unidos estimó que los dueños de vehículos Volvo con el sistema de seguridad en la ciudad realizaron un 27% menos de reclamaciones.
Este sistema usa la tecnología de frenado autónomo para evitar choques frontales y traseros.
Pero aún así, cualquier tecnología que afecta la capacidad del conductor de tomar decisiones es polémica.
Controversia
Los críticos dicen que si un conductor apenas puede hacer nada para controlar el vehículo en la carretera no será un conductor atento ni seguro. La Asociación de Conductores Británicos cree firmemente que cualquier tecnología que le quita responsabilidad al conductor debe ser prohibida.
“Debemos confiar en que la ingeniería puede lidiar con una serie de complejidades al igual que los humanos”, explica Peter Rodger, examinador en jefe del Instituto Avanzado de Conductores y expolicía de tráfico metropolitano. “Para mi eso es un poco como un acto de fe”.
Rodger, como muchos otros, cuestiona el hecho de cómo un conductor inconsciente de la carretera en la que circula podrá retomar el control del vehículo si el sistema de emergencia falla.
“¿Como logras transferir el manejo de un sistema automático a otro?”, pregunta.
Aumentar el papel de la tecnología también plantea otras cuestiones como si ésta tiene responsabilidad en el caso de un choque.
“¿Quién es responsable? ¿El coche, yo, el fabricante o el ingeniero que inventó el programa?”.
Computadoras al volante
Algunos creen que la solución al problema es dejar a las computadoras tomar el control total de la conducción. Vehículos inteligentes que pueden “ver” y comunicarse con otros coches en la vía.
Oliver Carsten, profesor de seguridad en transporte de la Universidad de Leeds, en Reino Unido, es uno de esos que cree en los autos totalmente automatizados en un sistema inteligente de transporte.
“¿Por qué no?”, pregunta. “Hay fuertes argumentos a favor de una conducción automatizada, para gente que lo encuentra aburrido y que puede hacer cualquier otra cosa mientras tanto, proporcionado grandes beneficios en términos de seguridad y consumo de combustible”.
Carsten cree que los accidentes múltiples en situaciones de conducción difíciles, así como una densa niebla, podrían ser evitados con sistemas automáticos.
“El único argumento en contra es su impacto medioambiental. Se daría un aumento del 50% en capacidad de las carreteras, lo que supone más vehículos y más combustible”.
Pero la ciencia todavía está lejos de construir un carro que no choca, sugiere el investigador.
Lo que muchos fabricantes están haciendo, destaca, es impedir las muertes y heridos, no prevenir las colisiones.
Volviendo al tema de Volvo, Broberg asegura a los conductores que los fabricantes no están tratando de quitarles el control.
Pero defiende la ambición de ignorar al conductor cuando toma una decisión que puede poner en riesgo su vida y la de otros.
Fuente:
http://www.bbc.co.uk/mundo/noticias/2011/12/111209_tecnologia_coche_perfecto_no_choca_aa.shtml