Por: Sarai Coscojuela | @ecoaliados21
China es uno de los países más contaminados del mundo y conscientes de esta situación han decidido tomar distintas medidas para reducir esta situación y para mejorar el medio ambiente.
Es por esto que ahora se han dado a la tarea de construir una muralla solar china, con 1200 kilómetros cuadrados de paneles solares. Se está desarrollando actualmente para ser uno de los parques solares más grandes del mundo.
Gracias a las condiciones geográficas de China, gozan de condiciones adecuadas para la electrificación solar porque cuentan con zonas desérticas y de fuerte radiación solar en su territorio. Actualmente el sector industrial tiene el 60% del mercado de la fabricación de paneles solares.
Actualmente ya cuentan con dos parques solares, uno de ellos es el Tengger Desert Solar Park que tiene una capacidad de 1.500 megavatios y está ubicada en un 3.2% del terreno en el desierto Tengger, región autónoma de Mongolia Interior.
Este complejo es gestionado por la empresa State Power Investment Corporation, que es una de las cinco grandes compañías del área energética de China.
Sin embargo este parque solar presenta algunos problemas como que no funciona de forma continua durante todo el año y que su construcción se hizo alejada de los pueblos y ciudades, por lo tanto mucha energía se pierde a lo largo de la transmisión.
Otro de los parques solares de China es el Longyangxia Dam que tiene una capacidad de 850 megavatios y cuenta con cuatro millones de paneles solares.
Está ubicado en la meseta tibetana de la provincia de Quinghai al noreste de China. La primera fase de este parque se completó en el año 2013 y la segunda en 2015 con un coste total de construcción de aproximadamente seis mil millones de yuanes, equivalentes a 920 millones de dólares.
Con todo esto más las construcciones futuras se estima que para el año 2040, la mitad de la producción energética del gigante asiático estará sustentada en fuentes renovables.
Estación espacial para la energía renovable
Igualmente China tiene un proyecto para construir una estación espacial para producir energía fotovoltaica y mandarla a la Tierra. La estación solar no sufrirá la interferencia de la atmósfera ya que estará ubicada a 36 mil kilómetros del planeta y servirá también para explorar otros planetas.
La idea es que la estación pueda captar los rayos del Sol sin interferencia de la atmósfera y generar energía las 24 horas del día. La energía se enviaría a la Tierra a través de microondas o rayos láser, una vez en la Tierra se convertiría en electricidad para el consumo de la red convencional.
Actualmente en la ciudad de Chongqing se está iniciando la construcción de una planta experimental de energía espacial. El plan inicial es diseñar y poner en marcha pequeñas centrales espaciales de energía solar entre 2021 y 2025. Una vez listas serán enviadas al espacio.