Brígido Iriarte nació en la parroquia Naiguatá, del entonces Departamento Vargas que formaba parte del Distrito Federal, el 10 de junio de 1921, se trasladó a Caracas en 1934 y de inmediato se incorporó a la práctica deportiva en la disciplina de béisbol.

Por Javier González

La historia del atletismo venezolano reserva un espacio muy especial para el incansable y versátil deportista guaireño Brígido Iriarte, quien en 1952 fue el primer especialista de nuestro país que compitió en la exigente prueba del decatlón en unos Juegos Olímpicos.

Nacido en la parroquia Naiguatá, del entonces Departamento Vargas que formaba parte del Distrito Federal, el 10 de junio de 1921, se trasladó a Caracas en 1934 y de inmediato se incorporó a la práctica deportiva en la disciplina de béisbol.

A la edad de 17 años decide sumarse a las filas del ejército y es asignado a prestar su servicio militar en la ciudad de San Cristóbal. En la capital tachirense tiene su primer contacto con el atletismo al representar a las Fuerzas Armadas Nacionales en competencias que se celebraban en el Estadio de La Concordia.

Al salir de baja en el año 1941, regresa a Caracas y de inmediato se integra al club atlético que entrenaba y competía en Los Caobos, al tiempo que continúa identificado con el béisbol y el fútbol. En la pelota destaca en la categoría clase A como integrante de los equipos El Trébol, Buses de El Valle y Urbanos, en tanto que en balompié de primera categoría sobresalió con los clubes Fomento, San Bernardino y Taurino.

En el año 1943 consigue su primera marca en el atletismo venezolano. Se eleva a 6,80 metros en la prueba de salto largo y fija récord nacional.

En el Campeonato Nacional de Atletismo, celebrado en Maturín, Monagas, en 1948 cumple sobresaliente desempeño en la modalidad de salto triple al imponer récord de 13,55 metros, marca que llegó a mejorar posteriormente hasta los 14,29 metros.

A nivel internacional su nombre figuró por primera vez en los III Juegos Bolivarianos celebrados en Caracas en 1951. Con 3.115 puntos subió al podio a colgarse la medalla dorada en la competencia de pentatlón.

Mejor latino en Helsinki

Iriarte formó parte de la delegación de 38 atletas que envió Venezuela a los Juegos Olímpicos de 1952, celebrados en Helsinki, Finlandia, del 19 de julio al 3 de agosto de 1952.

Era la segunda vez que nuestro país intervenía en la máxima cita del deporte universal, primera con múltiples competidores, después que en Londres-1948 asistió el ciclista Julio César León.

Iriarte formó parte de los siete especialistas de pista y campo que compitieron por Venezuela, entre los que sobresalió Asnoldo Devonish, quien hizo historia como el primer medallista olímpico del país al obtener medalla de bronce en la prueba de salto triple.

Junto a Devonish e Iriarte completaron el equipo de atletismo Filemón Camacho (800 y 1500 metros), Teófilo Davis (110 metros c/vallas), Paulino Ferrer (400 metros c/vallas), Teófilo Gutiérrez (100 y 400 metros) y Juan Leiva (100 y 200 metros).

Iriarte se inscribió en tres competencias: en salto largo no superó la eliminatoria, ocupó el 20° lugar, con 6,82 m y en lanzamiento de jabalina hizo 52,13 m, para quedar en el 26° puesto, sin lograr clasificar.

Y en la prueba combinada del decatlón, en la que el estadounidense Bob Mathias logró récord mundial al acumular 7 mil 287 puntos, Iriarte fue el mejor competidor de América Latina al finalizar en el 12° lugar con 5 mil 770 puntos. Los otros latinos que figuran en el cuadro clasificatorio fueron el chileno Hernán Figueroa (17° con 5.592 puntos) y los puertorriqueños Héctor Román (20° con 5.246 puntos) y (21° con 5.228 puntos).

En los dos días de competencia, Iriarte tuvo el siguiente desempeño en cada una de las diez pruebas: en la serie 4 de 100 metros planos llegó segundo, con tiempo de 11.66, para obtener 707 puntos; en salto largo ocupó la cuarta casilla con distancia de 6.06 metros, para sumar 804 puntos; en el impulso de la bala registró 11.66 metros y ocupó la 19° casilla, con 552 puntos; en salto alto se elevó a 1.60 metros, en el 22° lugar, para conseguir 555 puntos; en 400 metros planos compitió en la sexta serie y llegó tercero, con tiempo de 53.1, para 636 puntos; en la competencia de 110 metros con vallas corrió en la serie 2, llegó segundo con tiempo de 16.1, lo que le adjudicó 489 puntos; en lanzamiento de disco, llevó el implemento a distancia de 38.23 metros, para ocupar el décimo puesto y obtuvo 578 puntos; en el salto con pértiga se elevó a 3.40 metros, para quedar en la 16° posición con 3.40 metros y 476 puntos; fue quinto en el lanzamiento de jabalina con registro de 55.55 metros, lo que le dio 637 puntos y en los mil 500 metros, corrió en la serie 3, y figuró tercero con tiempo de 4.49.8 para recompensa de 336 puntos.

En 1954 asistió a los Juegos Centroamericanos y del Caribe en México. Subió a lo más alto del podio como ganador de oro en decatlón con 2748 puntos y la medalla de bronce en salto con garrocha (3.90 metros).

A la edad de 43 años representó a Venezuela por última vez en las pruebas de salto con garrocha y lanzamiento de jabalina, en los Juegos Panamericanos de Chicago en 1959.

En 1954, fue el primer ganador de la importante distinción Premio YMCA Buen Deportista de Venezuela. En 1971, fue exaltado al Salón de la Fama del Deporte Venezolano.

Desde 1977 el Estadio Nacional de El Paraíso, donde vivió por más de veinte años junto a su familia, como superintendente de mantenimiento de esa instalación deportiva, fue rebautizado con su nombre.

Iriarte falleció en Caracas, a la edad de 62 años, el 6 de enero de 1984.