Por Sarai Coscojuela (@Eco_aliados)

El agua es un recurso valioso que además es necesario para la existencia de los animales y los seres humanos. En nuestra vida cotidiana este líquido está presente en casi todos los quehaceres de la casa, incluyendo en el inodoro.

Sabemos además que hemos llegado a malgastar el agua aunque es un recurso escaso, por esa misma razón algunos investigadores y diseñadores se han dado a la tarea de crear retretes que consuman poca agua.

El primero de ellos es el inodoro Neorest, que fue presentado en el ConsumerElectronic Show de Las Vegas y a pesar de su costo tan elevado, $9.800, fueron vendidos 40 millones de la versión anterior.

La firma que produjo esta poceta señaló que aún se encuentran desarrollando el prototipo pero explicaron que cuando se tire la cadena, se rociará el interior del recipiente con agua electrolizada.

La ejecutiva, Lenora Campos, explicó también que el proceso transforma el agua en una especie de cloro suave.

Se supone que este será un inodoro inteligente por lo cual contará con un proceso de autolimpieza que utiliza una combinación de desinfectante y un esmalte, hecho de dióxido de circonio y titanio, que recubre el recipiente.

Igualmente es considerado un retrete fotocatalítico, lo que permite que los iones de oxígeno combatan bacterias y virus. “No tienes que limpiarlo durante un año”, agrega Campos.

Algo más avanzado es el Cranfield Nano MembraneToilet, que es una poceta que funciona sin agua. Fue creado por la Universidad de Cranfield y todo ha sido gracias a la nanotecnología. En principio este proyecto fue ideado para zonas con escasos recursos y para casas que no tienen acceso al agua.

Aunque no utiliza agua, este inodoro también evita que se produzcan malos olores. Una palanca da la vuelta al suelo del contenedor y los residuos caen, mientras que en un compartimento inferior se trata el residuo, extrayendo el agua en forma de vapor mediante unas membranas especiales.

Luego de accionar el vapor este se condensa y se puede utilizar en la casa para limpiar algún huerto o regar plantas. Los residuos se van almacenando en una bolsa recubierta con un nanopolímero biodegradable y se retira de forma periódica.

Secco es otro retrete que ha sido inventado para que se utilice sin agua. Este ha sido creado en dos versiones, una es portable e incluye un cubículo y está pensado para atención de emergencias y desastres.

La segunda versión es un inodoro fijo que puede ser implementado en instalaciones fijas.

Estos sanitarios no necesitan agua y tampoco electricidad y mucho menos requieren la instalación de tuberías.