Por: Sarai Coscojuela | @eco_aliados
Investigadores del Instituto Tecnológico de Massachusetts ha inventado un nuevo compuesto que busca transformar el almacenamiento de energía tal y como se conoce hoy en día.
Este avance incorpora los materiales clásicos de cambio de fase de este tipo de pilas unas moléculas que reaccionan ante la luz, lo que permitiría que el calor almacenado se libere justo cuando sea necesario.
El objetivo es acabar con el cambio de temperatura descontrolado de los materiales de cambio de fase convencionales, que provoca actualmente una pérdida muy rápida del calor almacenado. El principio de todo esto fue el hecho de que el problema de la energía térmica es que es difícil de mantener.
Para solventar este conflicto, los investigadores del MIT han instalado una nueva barrera de energía, para que así el calor no pueda liberarse de forma inmediata. Esa barrera es la molécula cuya forma varía en función de la luz.
Luego una vez incorporado a los materiales clásicos de estas baterías, como sales fundidas o ceras, el nuevo compuesto permite ajustar a través de la luz la temperatura del cambio de fase.
Este innovador invento puede almacenar alrededor de 200 julios por gramo y los test han constatado que permite que el calor almacenado se mantenga estable durante 10 horas.
En Alemania también existe un invento de este tipo, convirtiendo una mina de carbón en una batería gigante para almacenar excedente de energía solar y eólica.
La mina de Prosper-Haniel se convertirá en una hidroeléctrica subterránea con 200 Mw de potencia máxima para abastecer de energía limpia a 400 mil hogares. Esto es gracias a que las minas de carbón en el país europeo dejarán de funcionar desde el año que viene y tendrán la función que contribuirá con el desarrollo de las energías renovables.
Además almacenarán el exceso de energía eólica y solar y así podrá generar electricidad cuando no haya sol ni viento. Además se combinarán otras tecnologías para evitar cortes en el servicio, lo cual se asegurará con la instalación de paneles solares y aerogeneradores para aprovechar la luz del sol y la fuerza del viento.
Esta central eléctrica generará un tercio de la demanda de todo el país, pues la gran mayoría de la energía proviene de centrales térmicas que emplean carbón para la producción de electricidad.