El nombre de José Gregorio Monagas está directamente ligado al proceso de extinción de la esclavitud en Venezuela, ya que durante su presidencia se sancionó la ley de abolición, el 24 de marzo de 1854.
Por Inés Quintero * | IG @inesquinterom
Nacido en Aragua de Barcelona en 1795, José Gregorio Monagas se unió a la lucha por la independencia desde muy joven, participó en las campañas de oriente, en la recuperación de Barcelona, en el sometimiento de Guayana y en los combates que condujeron al triunfo de la causa republicana. Concluida la guerra, fue nombrado comandante militar de la ciudad de Barcelona. En 1824 viajó al Perú, al mando de un contingente armado para apoyar la campaña del sur y, al regresar a Venezuela, en 1827, fue ascendido a general de brigada, acto seguido se retiró de la vida pública y se encargó de administrar las haciendas de la familia.
En 1831 acompañó a su hermano José Tadeo Monagas en el proyecto de restauración de la Gran Colombia y también formó parte de la Revolución de las Reformas en 1835. Indultado por el gobierno, luego de su participación con los reformistas, se apartó de la política. Años más tarde, en 1844, el presidente Carlos Soublette lo nombró Comandante de Armas de Barcelona, cargo que ocupó hasta 1848, cuando se incorporó al gobierno de su hermano. En 1851 fue elegido presidente constitucional de Venezuela por el Congreso para lo cual contó con el apoyo de su hermano. Durante su gobierno enfrentó varios movimientos armados promovidos por paecistas y se logró la aprobación de la ley que abolió la esclavitud en Venezuela. Al concluir su mandato, se mantuvo al margen de la vida pública. No obstante, en 1857, se comprometió con el proyecto reeleccionista de José Tadeo. Al renunciar Monagas y concluir su gobierno, José Gregorio fue enviado prisionero a Puerto Cabello y de allí al castillo de San Carlos en la barra de Maracaibo, donde enfermó; antes de que pudiese ser atendido en la ciudad de Maracaibo, falleció el 15 de julio de 1858.