Por : Inés Quintero |@inesquinterom
Ana Francisca Pérez, nació en Petare posiblemente en 1744. Se casó con Baltasar de León y tuvieron un solo hijo. Ya viuda y cuando tenía 68 años, decidió hacer testamento. Allí dejó establecido que de su cuantiosa fortuna se destinara la cantidad de 16.500 pesos para que se hiciera un hospital de caridad dedicado a la atención de los enfermos más necesitados y desvalidos.
Al momento de su muerte, ocurrida en 1812, no hubo manera de ejecutar su última voluntad. Seguramente las circunstancias de la guerra impidieron llevar a cabo la construcción del hospital. No fue sino en 1830, 18 años después de su muerte, cuando su albacea testamentario hizo entrega al Concejo Municipal de Petare del monto dispuesto en el testamento para que se edificara el hospital.
Transcurrieron diez años más antes de que se ejecutara el caritativo deseo de Ana Francisca. En 1840, finalmente, abrió sus puertas el Hospital Pérez de León, omitiendo el nombre de pila de su principal promotora y benefactora.
Sólo fue en 2007, casi 200 años después de su muerte cuando, finalmente, se colocó de manera visible el nombre completo de Ana Francisca Pérez a este conocido hospital de Petare.
Fachada del Hospital Pérez de León en Coromoto Mendez Sereno.
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