La asertividad es la habilidad que permite expresar opiniones o sentimientos, ya sean positivos o negativos, de forma clara, directa y sin hostilidad. Es un comportamiento que se puede aprender, hasta para las personas que se han acostumbrado a silenciar sus verdaderas opiniones en pos de agradar al resto o evitar confrontaciones.
Experimentar bajo autoestima, tratar de agradar a todo el mundo, evitar las confrontaciones… reflejan una personalidad poco asertiva. Para tratar de integrar la asertividad en las situaciones sociales, el coach Javier González recomienda una serie de consejos:
1. Eliminar los pensamientos negativos
A la mayoría de las personas les incomoda decir que ‘no’ a la petición de un tercero. Es una sensación común, pero no debe permitirse que ese malestar impida hacer valer los derechos de uno mismo a negarse.
2. Solo informar
Cuando se expresan sentimientos no se debe buscar que el interlocutor los comprenda o los encuentre justificados, simplemente que los conozca.
3. Momento y lugar
Hay que saber elegir el momento y el lugar adecuado para comunicar sentimientos. Un café en un sitio tranquilo, una habitación de casa o una sala en la oficina en la que nadie interrumpa son sitios adecuados.
4. Mensaje estructurado
Hay que estructurar el mensaje, especificando hechos, sentimientos y consecuencias.
5. Banco de niebla
Hay que poner en práctica esta técnica, que consiste en reconocer que el interlocutor tiene motivos para mantener su postura, pero sin dejar de expresar que mantendrás la tuya.
Fuente: elEconomista