Un estudio de la Universidad de Navarra (7000 colaboradores encuestados en 23 países del mundo) revela que un entorno laboral enriquecedor genera mayor compromiso de los empleados y menor intención de dejar la empresa.
Un “entorno laboral enriquecedor” es aquel que ofrece a sus empleados posibilidades de conciliación, diálogo, consulta, reconocimiento, desarrollo de carrera, capacitación y aprendizaje, horarios flexibles, espacios físicos adecuados, relaciones de confianza y delegación de autoridad por parte de los jefes, consideración a la familia e hijos, metas compartidas y propósitos trascendentes.
Las empresas que han integrado esta noción en sus políticas y prácticas de RSE con sus empleados alcanzan mejores metas de productividad y menos absentismo. Estas empresas saben que el salario emocional constituye un ancla para captar y retener talento.
Para algunos expertos de la responsabilidad social, la salud emocional se ha convertido en la mejor arma para combatir el absentismo y abandono laboral.
Existen instituciones especializadas en el tema de la salud emocional en las empresas que las ayudan a crear programas para cuidar este vital aspecto de la integridad organizacional. En España, el Instituto Motus ha desarrollado un nuevo método que consiste en brindar a los equipos de trabajo la posibilidad de tratar, desde la confidencialidad, aquellos problemas que los acosa o los limita para crecer de manera personal o laboral. “Es un método individual en donde cada persona voluntariamente elige participar para solucionar problemas que no pueden revelar dentro de sus empresas por miedo a las consecuencias en su entorno o por desconocimiento de la labor de los departamentos de recursos humanos”.
Otro de los objetivos de Motus es fomentar la felicidad de los colaboradores para lograr un ambiente laboral más sano y productivo. Ellos afirman que esto es posible en grandes, medianas y pequeñas empresas.
Los departamentos de responsabilidad social corporativa están centrando sus esfuerzos en impulsar este tipo de programas. Además, en la actualidad, los nuevos talentos y los colaboradores también buscan trabajar en empresas que impulsan el salario emocional.
¿Qué es el salario emocional?
Son aquellas políticas y prácticas empresariales que representan contribuciones no económicas (dinero/salario) y que el colaborador percibe y valora como aportes significativos para su realización personal y profesional porque le ayudan a lograr mayor bienestar, crecimiento y desarrollo individual y social, junto a su familia y su comunidad.
Por ejemplo, las políticas de salario emocional pueden abarcar: programas que fomenten la participación de los colaboradores en la toma de decisiones de la empresa (diálogo y consulta), programas de apoyo a la salud física y mental, horarios más flexibles, espacios de trabajo gratos y estimulantes, esquemas de trabajo colaborativo e incentivos a la innovación, iniciativas de apoyo a la familia, promoción y movilidad, capacitación para el desarrollo, y reconocimiento a la trayectoria y al desempeño.
En resumen, 5 elementos del salario emocional
- Oportunidades de desarrollo: capacitación, gestión del talento, coaching, mentoring y plan de carrera, esquemas de trabajo colaborativo, aliento y retribución a la creatividad e innovación.
- Balance de vida: esquemas de trabajo flexibles, beneficios de salud, integración de la familia, oportunidades de esparcimiento y recreación.
- Bienestar psicológico: reconocimiento, autonomía, retos profesionales y trascendencia en la comunidad.
- Entorno laboral: clima de compañerismo, sentido de familia y equipo.
- Cultura laboral: RSE, ética en el trabajo y relaciones cercanas con los líderes.