A medida que pasa el tiempo, lo más normal es que su duración disminuya cada vez más, y para evitar que esto ocurra antes de lo esperado existen distintas opciones para ayudar a cuidarlas al máximo.
Por Saraí Coscojuela
Cuando empezamos a usar la computadora portátil, también conocidas como laptops, surgen dudas sobre cómo rendir su uso y si es mejor tenerlas todo el tiempo enchufadas o no.
Con las laptops nuevas tiende a ocurrir lo mismo que con un celular recién comprado, lo más común es que su batería se encuentre a pleno rendimiento, de forma que -más o menos- durará el tiempo indicado por el fabricante.
Sin embargo, a medida que pasa el tiempo, lo más normal es que su duración disminuya cada vez más, y para evitar que esto ocurra antes de lo esperado existen distintas opciones para ayudar a cuidarlas al máximo.
A diferencia de los teléfonos, es probable que las computadoras portátiles se mantenga enchufadas la mayor parte del tiempo.
No existe riesgo de que la batería se sobrecargue, lo que significa que cuando alcanza el cien por cien de carga esta se detiene.
Así, tan pronto la batería descienda del 100%, volverá a cargarse de nuevo. Por lo tanto, no existe el riesgo de que la batería se dañe por sobrecarga.
La mayoría de los portátiles usan una serie de sensores para asegurarse de que la batería no se recaliente ni sobrecargue.
Pero sí reducirá ligeramente su vida útil, siendo un fenómeno común como consecuencia del uso.
Se estima que la mayoría de las baterías tienen una vida útil estimada de alrededor de 500 ciclos completos. No obstante, a la vez, es necesario evitar mantener la batería a un nivel elevado durante demasiado tiempo.
Realmente, aún cuando se trate de un equilibrio difícil de conseguir, el nivel óptimo de batería es del 50 %.
La batería de una laptop también se puede afectar por factores ambientales como las altas temperaturas, el uso intensivo como los juegos de alta resolución o el uso de aplicaciones que consumen mucha energía.