Por: Elías Pino Iturrieta | @eliaspino
En 1728, el abuelo paterno de Simón Bolívar quiso ser marqués, como ya lo eran sus amigos y vecinos caraqueños de las familias Mijares y Tovar, por ejemplo. Con el beneplácito de su esposa, doña María Petronila Marín y Ponte, don Juan de Bolívar llenó la documentación del caso y adelantó los gastos económicos del trámite para hacerse del título de Marqués de San Luis, que estaba entonces en venta. La gestión se suspendió por la muerte del interesado. La madre del Libertador quiso reanudar el trámite para que ostentara la distinción su hijo mayor, don Juan Vicente Bolívar y Palacios, pero desistió por el elevado coste de los derechos. Fue así como la familia Bolívar se quedó sin un título de Castilla.