Que Simón Díaz, Tío Simón para viejas y nuevas generaciones, forme parte del acervo cultural de Venezuela es un hecho. Que sus tonadas traspasaron los límites del llano venezolano y sus boleros son parte del paisaje musical urbano, para nadie es un secreto. Así que no fue sorpresa el lleno total del concierto “Las nuevas voces interpretan a Simón Díaz”, en el marco del Festival Caracas en Contratiempo.
El público abarrotó el auditorio de Ciudad Banesco, donde además se dispuso de una sala para ver en pantalla gigante el espectáculo brindado por los cantantes y músicos invitados. La velada, que tuvo como presentadora a Bettsimar Díaz –hija del Tío Simón–, comenzó con Tonada de luna llena en la voz de Rafael Pino, luego Amanda Querales interpretó La pena del becerrero y Nana Cadavieco hizo lo propio con Cristal.
Gustavo Medina se montó al escenario con Luna de Margarita y la cantante y excepcional trompetista Linda Briceño tuvo su primera aparición de la noche con Tonada del tormento. Las estrofas de Mi querencia fueron versionadas por Mariaca Semprún.
Siendo un encuentro de nuevas voces, no podía faltar el sonido urbano. MCKlopedia, exponente del hip hop criollo, presentó Sabana. Con Pasaje del olvido volvió al escenario Rafael Pino, seguido de Todo este campo es mío en la voz de Amanda Querales.
En su segunda presentación, Nana Cadavieco ofreció El alcaraván. El entrañable loco Juan Carabina se paseó, no por San Fernando, sino por los predios de Bello Monte con Gustavo Medina.
El momento más emotivo de la noche lo protagonizó la joven y talentosa Linda Briceño. Su voz y su trompeta ofrecieron una sentida versión de Qué vale más. El público lo agradeció con una ovación de pie.
Las dos últimas canciones de la noche fueron interpretadas por Mariaca Semprún (Tonada del cabestrero) y MCKlopedia (El negro y el catire).
En el homenaje estuvo presente la familia del Tío Simón. Su esposa, hijos y nietos estuvieron acompañados de un numeroso y entusiasta público. Los hijos de Simón, o los primos, se subieron al escenario: Bettsimar se encargó de presentar junto a Aquiles Báez “El gatico juguetón”, mientras que su hijo encabezó El Becerrito, el famoso terné de la vaca Mariposa.
Antes de finalizar la velada, el público se unió para corear la más universal de las canciones del Tío: Caballo viejo.
El Festival Caracas en Contratiempo se inició el pasado 27 de julio y se extenderá hasta el domingo 4 de agosto. En varios puntos de la ciudad capital se ofrecerán charlas, conferencias, jammings, encuentros y conciertos con los principales exponentes de la escena musical actual venezolana.
GALERÍA DE FOTOS:
Fotos: Eusebio Montilla/Banesco