Existen alimentos como el arroz, enlatados, los fideos, entre otros, que los puedes guardar en la despensa sin ningún problema y esperar una buena cantidad de tiempo para ingerirlos. Sin embargo, hay también alimentos perecederos que apenas los abres, los tienes que comer si no quieres que se malogren. El queso, el pan, las hierbas o algunas verduras sufrirán y vencerán si no las ingieres de inmediato. Existen algunos trucos que puedes usar para evitar que esto te suceda.

Hongos. Si quieres guardar hongos sin que se malogren o se venzan, colócalos dentro de una bolsa de papel, pues esta absorberá el exceso de humedad del producto.

Huevos. Frotar un poco de aceite en la cáscara de los huevos hará que estos alarguen su vida durante un periodo adicional de entre dos y tres semanas.

Plátano. Si quieres que tus plátanos duren mucho más y no se pongan negros, envuelve la punta en papel plástico film.

Queso. Si deseas conservar un pedazo de queso, debes untar un poco de mantequilla en el lado del corte. Así evitarás que este se seque.

Verduras. Algunas verduras de color verde como  la lechuga y el brócoli se conservan de una mejor manera cuando las envuelves en papel aluminio antes de que las pongas en la nevera.

Hierbas frescas. Si deseas almacenar algún tipo de hierba durante un largo tiempo, debes colocarlas picadas en una bandeja con hielo y cubrirlas con aceite de oliva o mantequilla. Congélalo durante un día, y luego las podrás guardar en una bolsa con cierre durante un mes.

Fuente: emedemujer