Por Froilán Fernández

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Con la masificación en el uso de los smartphones han surgido juegos de gran popularidad como Angry Birds, Candy Crush o Plantas contra Zombies que son calificados de adictivos.

En estos juegos se requiere más habilidad a medida que se avanza en los diferentes niveles. Los trucos para poder pasar a niveles superiores son compartidos en los foros sociales o directamente entre los jugadores, pero los mayores puntajes están reservados a los más perseverantes, a quienes dedican más tiempo y entusiasmo a vencer los retos de cada juego.

Hay toda una nueva generación de apps que se vuelven adictivas por la razón contraria: avanzar en el juego sólo requiere maniobras repetitivas, sin necesidad de estrategias complicadas.

Potencias de 2

Un ejemplo de esta categoría de apps sencillas de ejecutar y con una meta clara es el juego 2048, que consiste en manipular un tablero 4×4 en el que aparecen inicialmente varios números. Cuando dos números iguales se tocan, se suman y aparece una ficha con el número duplicado.

De los números “2” iniciales se generan “4”, luego “8” y así las sucesivas potencias de 2, hasta lograr 2048, la meta final. A pesar de que los intentos del inicio sólo resulten en un 32 ó en un 64, los jugadores reinician con entusiasmo el juego para tratar de superarse.

La estrategia más recomendable es conservar la mayor potencia de 2 obtenida en una de las esquinas.

Esta app se derivó de los juegos similares 1024 y Threes. Una ventaja del juego 2048 es que además de estar disponible en Android y iPhone, también puede jugarse en el PC Windows y hay versiones para Mac y Linux.

Números lúdicos

Otro juego numérico que acapara la atención es Brain Age Test, una aplicación para Android. Esta app siempre plantea un reto mayor, partiendo de una situación muy sencilla.

En la pantalla aparecen tres números (en el primer nivel). Pocos segundos después los números quedan tapados por unas burbujas rojas. El objetivo es tocar cada globo en donde estaban los números, pero cuidando que sea en orden ascendente, es decir, lo que se evalúa es la memoria en este caso y la habilidad de respetar el orden de los números.

Si hay una equivocación, existen dos opciones más para continuar. Es posible compartir el puntaje y logros en la red social del juego.

La ventaja de estos juegos numéricos está en que a través de actividades divertidas se manejan conceptos matemáticos. De allí su gran potencial educativo. Después de todo, los niños tienen una atracción y curiosidad naturales por los números que deben ser aprovechadas.