De formación autodidacta, fue nombrado maestro de la Escuela de Primeras Letras en 1794. Dos años después publica un ensayo acerca de la enseñanza que se imparte en la colonia y hace un conjunto de propuestas para su renovación. No tiene ninguna aceptación. Renuncia al cargo y se compromete con la conspiración de Gual y España. Logra huir de Venezuela y, desde entonces, adopta el nombre de Samuel Robinson.
Por: Inés Quintero |@inesquinterom
Simón Rodríguez nació en Caracas en 1769. De formación autodidacta, fue nombrado maestro de la Escuela de Primeras Letras de la ciudad en 1794. Dos años después publica un ensayo acerca de la enseñanza que se imparte en la colonia y hace un conjunto de propuestas para su renovación. No tiene ninguna aceptación. Renuncia al cargo y se compromete con la conspiración de Gual y España. Logra huir de Venezuela y, desde entonces, adopta el nombre de Samuel Robinson. Finalmente se establece en París. En 1804 se encuentra con Simón Bolívar y hacen juntos un largo viaje por Europa que tendrá gran influencia en la formación del joven caraqueño.
Se mantiene en Europa hasta 1823, cuando regresa a la República de Colombia y funda una escuela en Bogotá. Llamado a Perú por Simón Bolívar, lo acompaña a Bolivia. En 1826 es nombrado Director de enseñanza, pero sus avanzadas ideas sociales y educativas no tienen aceptación.
Vive en diferentes pueblos y ciudades de Ecuador, Chile y Perú, llevando adelante sus proyectos educativos, mientras publica sus muy variados y polémicos ensayos en los cuales expone sus ideas sociales y sus propuestas para una educación republicana.
Falleció olvidado y en la pobreza en Amotape, Perú, en 1854. Sus obras completas han sido editadas numerosas veces y se pueden consultar libremente en internet.
Simón Rodríguez, mosaico publicado en nuestra cuenta en Instagram
Imagen: Retrato de Simón Rodríguez por Oswaldo Guayasamín, S/F, Colección Academia Nacional de la Historia.
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